LOS APARATOS IDEOLÓGICOS

 

Aparato Ideológico del Estado, es un concepto introducido por Louis Althusser que se suma al de Aparato Represivo del Estado. A diferencia de estos últimos sin actuar como medida central con la represión, se basa en que diferentes instituciones difunden las ideologías dominantes en una sociedad; la iglesia, la escuela, la familia, medios de comunicación, la cultura popular y la publicidad, etc; difunden de forma sutil las relaciones capitalistas, generan conciencia de clase sosteniendo el orden social establecido.
 

El Estado ha utilizado y sigue utilizando en muchos casos, la educación, la cultura y los medios de comunicación para influir en las creencias y valores de la población, así es más fácil que las desigualdades y explotaciones perduren en la sociedad, manteniendo las relaciones de poder del capitalismo. 

 

CULTURA Y EDUCACIÓN BAJO LA INFLUENCIA DE UNA IDEOLOGÍA CONSERVADORA

 

Durante años, la cultura en los gobiernos de derecha, bajo el sistema capitalista, se ha enfocado en la formación de las personas, desde la etapa escolar hasta la vida adulta. Esta formación escolar está estrechamente relacionada con la vida económica de los adultos. El capitalismo y los gobiernos de derecha han utilizado la educación y la cultura como herramientas ideológicas del estado, que actúan de manera distinta a los aparatos represivos, pero que comparten el mismo objetivo: mantener la dominación de la sociedad y perpetuar sin cuestionamientos el sistema capitalista. Se ha hecho hincapié en el individualismo, la competitividad y el éxito personal, contribuyendo así a la desigualdad social y económica, profundizando la brecha de clases en la sociedad.

 

El pueblo se ve obligado a vivir con lo justo, trabajando para los dueños del capital, sin cuestionar el sistema y asumiendo como natural la diferencia de poderes. La falta de igualdad de oportunidades dificulta el traspaso de una clase a otra, ya que muchos carecen de los recursos necesarios para acceder a una educación de calidad.

 

Por ejemplo, la apertura de una institución pública en un área determinada por los capitalistas se considera como garantía de igualdad de acceso para todos los habitantes. Sin embargo, la realidad es que factores como el transporte, la alimentación, los materiales de estudio y el apoyo familiar son fundamentales para que las personas puedan aprovechar dicha institución.

 

Es crucial reconocer que simplemente inaugurar una institución no es suficiente para garantizar la igualdad de oportunidades, ya que existen barreras adicionales que limitan el acceso a la educación superior. Es necesario abordar estas cuestiones para lograr una sociedad más equitativa y justa para todos.

 

DESDE LA MIRADA PROGRESISTA: UNA PERSPECTIVA ALTERNATIVA.

La alternativa desde la visión de la izquierda es promover políticas y programas que enfaticen la igualdad de oportunidades y la equidad en la sociedad. Esto incluiría garantizar el acceso universal y gratuito a una educación de calidad en todos los niveles, desde la educación básica hasta la educación superior, pero también, atendiendo otros aspectos que hacer a que realmente e igualdad de oportunidades, con por ejemplo, becas de alojamiento, transporte, alimentación, materiales, atención mediante equipos multidisciplinarios que estén en permanente contacto con sus familias, clubes deportivos y actividades extra curriculares, lo que sin dudas logrará una educación integral y un compromiso y sentimiento de pertenencia no solo del estudiante, sino de sus familias. 

 

Además, se deberían implementar medidas para reducir la brecha de desigualdad económica, como la redistribución de la riqueza a través de impuestos progresivos y políticas de bienestar social que aseguren un nivel básico de vida para todos los ciudadanos. Se debería fomentar una cultura que valore la solidaridad, la colaboración y el bienestar colectivo por encima del individualismo y la competencia desmedida. Esto implicaría promover la participación ciudadana y la organización comunitaria para construir una sociedad más justa y democrática.

 

La alternativa desde la visión de la izquierda es construir una sociedad basada en la igualdad, la solidaridad y la justicia social, donde todos tengan las mismas oportunidades de desarrollo y realización personal, independientemente de su origen social, económico, de identidad de género, etnico racial, migrante o ideológico.

 

La cultura de la izquierda pretende impactar en la sociedad respaldando políticas culturales y educativas más inclusivas, equitativas, diversas y sin violencia de genero. 

 

La cultura de la derecha capitalista promueve el consumismo y el materialismo, lo que puede llevar a una sociedad centrada en la adquisición de bienes materiales. Esto también se refleja en la imposición de estereotipos en aspectos como la moda y los útiles escolares, creando una división entre los poderosos y los trabajadores. Esta diferenciación a menudo se convierte en motivo de burla, generando críticas y chistes hacia aquellos que no cumplen con los estándares establecidos por la sociedad capitalista.
 

Por otro lado, la cultura de la izquierda busca priorizar el bienestar colectivo y el cuidado del medio ambiente, lo cual puede influir positivamente en la sociedad promoviendo un enfoque más sostenible y solidario.

 

EL FRENTE AMPLIO SE COMPROMETE A UN GOBIERNO CON PARTICIPACIÓN 

 

Además, el Frente Amplio se compromete a fomentar la participación ciudadana a través de asambleas nacionales, departamentales y locales, donde se involucren diversos grupos organizados como jóvenes, artistas, deportistas, personas con discapacidad, personas adultas mayores, personas trans y no binarias, entre otros. Estas instancias de diálogo y debate permitirán fortalecer la democracia participativa y garantizar una representación inclusiva de la diversidad de la sociedad.

 

La promoción de la participación ciudadana es fundamental para construir una sociedad más justa y equitativa, donde todos los sectores tengan voz y participación activa en la toma de decisiones que afecten su vida y su entorno. A través de estas asambleas y espacios de encuentro, el Frente Amplio busca empoderar a la ciudadanía y generar procesos de construcción colectiva que contribuyan al desarrollo sostenible y al bienestar de todos los ciudadanos.

 

Tanto la cultura de la derecha capitalista como la de la izquierda poseen formas únicas de influir en la sociedad, generando impactos diversos en base a sus valores y creencias fundamentales. Es momento de transformar lo que ha sido una cultura y educación que históricamente ha tratado al pueblo como títeres. Debemos cambiar esta mentalidad por una cultura de participación ciudadana, diálogos, y reuniones barriales. 

 

Es crucial acercarnos verdaderamente a los vecinos, artistas, deportistas, y personas vulnerables a través de proyectos y estrategias que sean implementadas desde las bases de la sociedad. Debemos abandonar los sillones de poder, dejando las oficinas cómodas del estado, y adentrarnos en todos los rincones de nuestra comunidad, escuchando atentamente y tomando en cuenta las opiniones de todos. 

 

Juntos, construiremos una nueva realidad en la que los cambios no sean impuestos, sino que surjan de la propia gente y comunidad. Es el momento de romper con lo establecido y construir juntos un futuro más justo y equitativo. La educación y la cultura no pueden seguir siendo utilizadas como herramientas de dominación y control, es momento de transformarlas en instrumentos de empoderamiento y liberación. 

 

Desde el Frente Amplio consideramos que es fundamental repensar y transformar nuestros paradigmas actuales en torno a la educación y la cultura. Estos dos elementos son pilares esenciales en la construcción de una sociedad más igualitaria y justa. Es imprescindible despojar a la educación y la cultura de cualquier connotación de control y opresión, y en su lugar, utilizarlos como herramientas para fortalecer la autonomía de las personas y promover su libertad. Debemos trabajar para que cada ciudadano se convierta en un individuo más libre y fortalecido.

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Es necesario tomar conciencia de la importancia de trabajar juntos para construir una sociedad más justa e inclusiva. La colaboración activa de cada individuo es esencial para alcanzar este objetivo. Es fundamental que cada persona se involucre de manera proactiva en la búsqueda de soluciones a los problemas sociales y en la construcción de un futuro más prometedor para todos.

 

La educación y la cultura desempeñan un papel clave en este proceso de transformación del país, y de cada una de las localidades. Debemos luchar por una educación que sea verdaderamente liberadora y que brinde las herramientas necesarias para que cada persona pueda alcanzar su máximo potencial. Es imprescindible promover la diversidad y la inclusión en todos los ámbitos de la sociedad, garantizando que cada individuo sea respetado y valorado por igual.

 

Desde el Frente Amplio nos comprometemos a trabajar juntos con la gente, en la construcción de una comunidad donde la solidaridad y la igualdad sean los pilares fundamentales. Con la iniciativa del Frente Amplio, pero con las manos de todas las personas, está la capacidad de cambiar el rumbo de la historia y de construir un futuro más equitativo y justo para todos. 

 

El gobierno que se viene, no se asemeja con ningún otro, ni del propio frente amplio y mucho menos de la coalición multicolor, debemos adaptarnos t re construirnos permanentemente adaptados a los tiempos actuales, por eso, gobiernos nacionales, departamentales, locales y sociedad civil debemos ser agentes del cambio y dar la bienvenida a una sociedad más inclusiva y solidaria.

 

Tec. Pablo Miranda Ponce

Frenteamplista Independiente

ArtistaNacional

Docente

Técnico en Redes y Telecomunicaciones 

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